COCOLITO SWEET

El diseño de este diminuto ejemplar de cocolito sweet fue posible gracias al microscopio con láser de barrido proporcionado por Louis Trebuchon, una de las mayores autoridades sobre esta familia de oceánica tradición repostera. Y es que, ampliadas a escala 1:105, las imágenes hablan por sí solas: delantal a base de anémonas de mar que apenas disimulaban una más que generosa barriga; manga pastelera en la pinza izquierda y espátula a la derecha; por todo el caparazón, restos de crême brûlée y, entre los pies, un minúsculo soplete. Y, a su alrededor, además de cientos de homúnculos de mantequilla, leviatanes de marrón glacé y ojos de cíclope de azúcar glass, un ejemplar -algo humedecido ya- de Le Viandier de Tirel.x