SR. CHOW

Rodeado por el humo sempiterno de su cigarrillo, bajo un impoluto traje oscuro y peinado con una raya que separa los mechones ondulados enmarcando su rostro enamorado, con un pañuelo asomando discretamente del bolsillo y una corbata de líneas orgánicas en espléndido damero, el estilismo del Sr. Chow es, como el de la Sra. Chan, esencial en su naturaleza. Como si su piel verdadera fuera aquella con la que se viste, hasta el punto que la película elige mostrarlo solamente así y no de otra manera, aún en sus momentos más íntimos. De modo que así lo hemos hecho también con este Maxi pendiente que recrea su maravilloso protagonista masculino.