BUSANITO DE MAR

Si en las dos primeras entregas de Busanitos, poríferos y otros invertebrados hallados en la fosa de las Marianas (1673, 1679) el autor se permitía licencias algo sospechosas, en el volumen que cierra la serie (1685) su imaginación se desató. Vale que su morfología es infrecuente en la fauna oceánica, y que su fisionomía podría recordar vagamente a una figura prehistórica. Su larguísimo cuello no ayuda. Tampoco sus andares pesados, o la cola o su bigote de morsa. Pero de aquí a presentárnoslo como un antepasado enano del monstruo del Lago Ness hay un trecho, ¿no?