Nada por aquí...

AUTÓMATAS

70,00 

Schlemmer llevó su obsesión juvenil por los autómatas a su obra maestra, convirtiendo al actor en un autómata de gigantescas dimensiones que debía infundir temor. Con ello, las pasiones humanas se desvanecen. Toda espontenidad y desmesura desaparecen. La marioneta de nuestro sueño debe hacer reír, confesaba. Y, a raíz del resultado, ¡parece que lo logró!

  • 7,75 g
  • 5,46x6,67 cm
  • Metacrilato y latón con baño hipoalergénico en oro de 18k.
  • Unidades limitadas
  • Envíos gratis a la Península
  • Devoluciones fáciles