Nada por aquí...

ONDAS

40,00 

El oso volvió a entrar en las aguas poco profundas moviendo la breve cola y al estremecerse creó remolinos a su alrededor. Se adentró más en el río y golpeó el agua con las patas. Por un momento, Lou temió que se alejara, pero no: se sentó dándole la espalda, relajado. Impulsivamente ella cogió agua con las manos y salpicó al oso, que se sacudió y tembló. Lou casi gritó de satisfacción. (Oso, Cap. VIII, p. 60)

  • 2,2 g
  • 1,6x3,69 cm
  • Metacrilato y latón con baño hipoalergénico en oro de 18k.
  • Unidades limitadas
  • Envíos gratis a la Península
  • Devoluciones fáciles