Nada por aquí...

INTERSECCIÓN

130,00 

No firmó sus cuadros hasta muy tarde: la mayoría de las obras pintadas en Europa fueron suscritas con una simple “X”. Pero lejos de limitarse a una firma, la X era integrada en el cuadro como un elemento en ocasiones principal. Porque Xul hizo de la inicial de su pseudónimo un recurso gráfico, usándolo para representar el esquema de un hombre que extendía sus brazos hacia el cielo, como dos fósforos que multiplicaban su energía cerebral.

  • 6,7 g
  • 3,5x8,7 cm
  • Metacrilato y latón con baño hipoalergénico en oro de 18k.
  • Unidades limitadas
  • Envíos gratis a la Península
  • Devoluciones fáciles