Nada por aquí...

Las amistades peligrosas

2023
Llega una historia de poder y venganza, de crueldad y manipulación.

En vísperas de la Revolución francesa, en el opulento reinado de Luis XVI, dos nobles desalmados se embarcan en un duelo de seducción del que nadie saldrá indemne y cuyas maquinaciones, recogidas de forma epistolar por Choderlos de Laclos (1782) y encarnadas luego por John Malkovich y Glenn Close, protagonizan nuestra apuesta para esta temporada.

Llega una historia de poder y venganza, de crueldad y manipulación, capturada a través de 24 accesorios que constituyen el mayor desafío estético de papiroga hasta la fecha. Escena a escena, pieza a pieza, la colección va desvelando las oscuras intenciones del Vizconde Valmont y la Marquesa de Merteuil, dos antiguos amantes, cínicos y egoístas, regidos por un irrefrenable deseo de engañar.

Lo que comienza como provocación, como un juego caprichoso, pronto se convierte en rivalidad enfermiza, en un odio patológico que arrasará en su espiral de destrucción a quien se ponga por delante: ya sea la inocente Cécile o su madre, la piadosa Madame de Volanges; el Caballero Danceny, Madame de Rosemonde o la Presidenta de Tourvel, modélica en su lucha contra la tentación.

Presentamos aquí una crónica erótica, una sátira punzante de una corte sepultada a secretos, a cada cual más escandaloso, bajo los que resplandece, gracias al fulgor inédito de las perlas, una despampanante selección de pendientes y collares, de anillos y pulseras, majestuosa y delicada, sensual y deslumbrante, en un ejercicio extremo por decantar el alma del Barroco sobre los diseños más puros.

Motivos florales, orgánicos, inspirados en brocados y tapices cortesanos, brotan de una paleta de color que refleja la evolución de los personajes a medida que se envenena la trama. Así, a la pasión inicial de la Marquesa de Merteuil corresponderán rojos y rosas que se irán diluyendo en blancos y plata una vez el desencanto enfríe el ardor. Una línea similar a la que exhibe Cécile, cuyo candor juvenil cristalizamos en piezas atrevidas y al mismo tiempo discretas. De esa plácida gama parte también Madame Tourvel hasta que Valmont se empeñe en teñir sus días del color de la lujuria. Y para este último, príncipe del libertinaje, espíritu de la depravación, el azul marino, tan subyugante en su desafiante oscuridad.

Y tras las intrigas y escarceos, en el corazón mismo del relato, una crítica despiadada a la alta aristocracia, decadente y ensimismada, entregada a las apariencias y la frivolidad, en un mundo ya periclitado en el que nada ni nadie es lo que parece y contra el que se alzará, irremediable y sangrienta, la insurrección popular.

Y tras las intrigas y escarceos, en el corazón mismo del relato, una crítica despiadada a la alta aristocracia, decadente y ensimismada, entregada a las apariencias y la frivolidad, en un mundo ya periclitado en el que nada ni nadie es lo que parece y contra el que se alzará, irremediable y sangrienta, la insurrección popular.